Toda familia tiene su oveja negra. Y la familia de la Ministra de Derechos Humanos no es la excepción. En la justicia avanza contra uno de sus tíos una causa por “transporte de estupefacientes”.

La noticia parece haber pasado desapercibida el viernes pasado; pero la rescatamos gracias al twitter del periodista Federico Pinedo: un serio problema en la Justicia Federal para un tío de Marianela Cansino.

Citamos el texto publicado por El Tribuno (al menos en su edición web):

Avanza en la Justicia Federal una causa contra una banda de narcotraficantes que usaba la provincia de trampolín para traficar por la cordillera de los Andes marihuana paraguaya a Chile. El negocio consistía en transformar los $1.000 que cuesta el kilo de marihuana en Paraguay, en unos $14.000, que es lo que se paga por el mismo kilo en Chile. Uno de los siete detenidos es el tío de la ministra de Derechos Humanos de la Provincia, Marianela Cansino.

Eduardo Cansino está acusado de integrar la organización delictiva que tejió una red de contactos con operadores de varias provincias para vender la droga en el vecino país trasandino. En los últimos días de agosto de 2012, el Juzgado Federal 1, a cargo de Julio Leonardo Bavio, recibió un informe de inteligencia que terminó activando una frondosa causa. Los investigadores no tenían dudas esa madruga del 3 de mayo, en la rotonda de Limache.

La información acumulada en siete cuerpos y 1.800 fojas respaldaba los indicios. Las escuchas del grupo de tareas de inteligencia de la Policía de Salta, Frontera Norte, los habían llevado a ese desenlace. Estaba acorralada la aceitada banda que preparaba su próximo gran golpe. Las conversaciones intervenidas se intensificaron y las fuerzas de seguridad entendieron que el cargamento estaba en movimiento. La emboscada se organizó de inmediato. Juan Pablo Paso, oriundo de Buenos Aires, fue cercado alrededor de las cuatro de la mañana en la estación de servicio ubicada en la rotonda de Limache. Cayó con 170 ladrillos de marihuana ocultos en las ruedas de un camión Mercedes Benz con semirremolque. “No perdamos tiempo, ¿cuáles son las ruedas donde está la droga?”, pedían los investigadores. Después de desarmar tres cubiertas los efectivos secuestraron casi 156 kilos de marihuana. Era uno de los tres allanamientos que había ordenado el juez Bavio. En Vaqueros y barrio San Carlos cayó el resto de la banda que introducía marihuana por Paraguay y la traficaba a Chile. En total fueron siete los detenidos. Uno de ellos fue Eduardo Cansino, de 66 años, tío de la ministra de Derechos Humanos.

La banda también estaba integrada por un mendocino, un misionero, un correntino y un brasileño que residía en Encarnación, Paraguay, según las fuentes judiciales. Estos fueron detenidos en la localidad de Vaqueros. En barrio San Carlos fue apresado Eduardo Cansino, al que fuentes cercanas a la investigación señalan como el encargado de la logística de la organización. Los detenidos se negaron a declarar el 5 de mayo último. Estaban esperando que los abogados defensores pudieran estudiar la causa que produjo 1.800 fojas. Según reportes de la policía local, el precio del kilo de marihuana comprado en Paraguay ronda entre 500 y 1.000 pesos argentinos. En Chile, en cambio, el kilo de marihuana, según informó la Policía de Neuquén en un reciente allanamiento, se comercializa a 14.000 pesos argentinos.

La carga incautada en la rotonda de Limache rondaría los $2.170.000. Según fuentes judiciales, este no habría sido el primer cargamento de marihuana que la banda cruza por la cordillera a Chile. El delito por el cual serán indagados los siete detenidos es “transporte de estupefacientes”, para el que la Ley 23.737 estipula una pena con reclusión o prisión de 4 a 15 años. Fuentes judiciales afirmaron estar muy conformes con los elementos reunidos en las distintas etapas de la investigación y remarcaron que son concluyentes. “Hay elementos más que suficientes para que esto avance hacia el procesamiento de los indagados”, destacaron. Las voces de las autoridades Es mi tío. Me enteré de esta noticia cuando fue la detención porque me llamó el ministro de Seguridad para preguntarme si existía algún vínculo familiar, que efectivamente le confirmé. Me sorprendió la noticia. Pero con mi tío no tengo vínculo personal alguno, mucho menos comercial. La relación siempre fue distante con él y no tenemos ningún tipo de diálogo. No sé cuál es su situación en procesal, ni si sigue detenido.

Me parece que la Justicia lo tiene que investigar como a cualquier ciudadano y llegar a la verdad”, le dijo a El Tribuno la ministra Marianela Cansino. “Hay que destacar que aunque es una investigación que nace en la Justicia Federal, fue la Policía de Salta la que posibilitó ese desenlace. La policía actuó de auxiliar de la Justicia en lo que fue un trabajo muy serio y minucioso. La actuación del personal policial del programa Frontera Norte fue imprescindible para alcanzar las detenciones y desbaratar la organización. Este accionar se enmarca en el plan de este Gobierno, que está enfocado en darle batalla a las drogas en todos los barrios de Salta.

En ese sentido, tenemos todos los recursos asignados a esa misión y este caso es un claro ejemplo de ello”, dijo el ministro de Seguridad Alejandro Cornejo D‘Andrea.