A falta de ideas, el romerato canaliza sus batallas a través de la cada vez más desacreditada Cámara de Comercio de Salta. Su presidente, Gustavo Herrera, fue la figura designada para arremeter contra las ferias barriales organizadas por el municipio. La recesión azota a sus colegas, pero no duda en reivindicar las políticas de Milei. Exige “reglas claras” para todos, pero del trabajo en negro en su rubro, ni una sola palabra.
Jerson De Cecco
Una figurita repetida en las páginas del diario familiar, histórico vapuleador de manteros y enemigo de los feriados y reclamos salariales. Así se perfila Gustavo Herrera, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Salta y peón del romerato en sus aspiraciones de cara al año electoral.
Los movimientos de fichas en la antesala de la elección de medio término se muestran cada vez menos discretos y, con la sutileza de un elefante en un bazar, la familia Romero encauza sus intereses a través de cuestionables figuras. En los últimos días Herrera se constituyó en vocero contra las ferias barriales organizadas por la municipalidad de Salta, particularmente contra el programa “El Mercado en tu Barrio”, que ofrece productos a precios promocionales a través de convenios con empresas.
El argumento es tan predecible como poco sólido. Para la Cámara, las ferias itinerantes compiten de manera desleal con otros comercios, a pesar de realizarse de manera esporádica y en distintos barrios. Ese fue el planteo que llevaron a los medios de comunicación en una conferencia realizada en el Mercado Cofruthos, junto a su presidente, Enrique Del Pino.
Horas antes habían mantenido una reunión con el senador Juan Romero en las instalaciones de la Cámara, un convite que no pasó desapercibido y que no dudaron en promocionar a través de sus canales institucionales. “Los presentes trataron temas como la Ley Bases, las perspectivas de inversión y generación de empleo para Salta, las implicancias de la reforma laboral, el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) y otros temas cruciales para el desarrollo económico de la provincia”, explicaron en el comunicado.
Las fotografías del cónclave dejaron muy en evidencia la maniobra, al punto que uno de los dos voceros, Enrique Del Pino, optó por despegarse de sus propios dichos horas más tarde. “Desde Cofruthos no estamos en contra del Mercado en tu Barrio, al contrario. Sólo prestamos las instalaciones a la Cámara de Comercio para que realice su reclamo”, fueron -palabras más, palabras menos- los dichos del presidente de la Cooperativa frutihortícola. Resulta entendible. Días después, el municipio informó sobre la incorporación de la Cámara de Pequeñas y Medianas Empresas (CPyME) en las siguientes ediciones del mercado.
El reclamo cada vez más en soledad de Herrera adquirió paulatinamente la forma de berrinche mediático. La repentina aparición de otros voceros de escasa credibilidad, como el ex diputado macrista, Martín Grande, no contribuyeron demasiado a fortalecer el reclamo. Desde su programa de TV, el ex-espadachín de Bullrich en Salta disparó: “A los que pagan impuestos, les mandan el control municipal, pero en las ferias que hace el intendente, nadie paga impuestos. Dejemos de pagar impuestos todos y se acabó, vendemos todo más barato”.
El planteo de Grande no cataloga siquiera como razonamiento. Desde la organización del Mercado en tu Barrio aclararon reiteradas veces que los puestos ubicados en la feria corresponden a empresas constituidas y registradas que tributan a la comuna como cualquier otra. Los productores de frutas y verduras, en tanto, deben acreditar el cumplimiento de normas de higiene y capacitarse para su inclusión formal. Los precios promocionales forman parte del acuerdo entre el gobierno municipal y las empresas para paliar la caída estrepitosa de las ventas. El motivo es la recesión brutal que afecta a casi todo el comercio y que, ni Herrera ni Grande, parecen dispuestos a reconocer.
Militantes de la “libertad”
Días antes de la puesta en escena en las instalaciones del Cofruthos, Enrique Del Pino declaró ante los medios que las ventas en el mercado de frutas y hortalizas cayeron un 40% como producto de la crisis nacional. Su ladero en la conferencia, no obstante, no se ahorra los elogios para el gobierno libertario. “Creemos que es clave avanzar sobre un reordenamiento macroeconómico en cambios de fondo, que permita abrir nuevos negocios y que permita contratar empleados en la formalidad”, destacó Gustavo Herrera en una entrevista con El Tribuno.
Para su , las políticas del padre de Conan provocaron hasta ahora el cierre de 3559 empresas, según datos de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo (SRT). En cuanto al trabajo registrado, las cifras de la era Milei no acompáñan el anhelo de Herrera. Desde el 10 de diciembre, en la Argentina, hay 94.900 trabajadores privados registrados menos, de acuerdo a un informe del SIPA.
Hombres de negro
Salta se posiciona como la segunda provincia del país con mayor porcentaje de trabajo no registrado. El campo y el comercio encabezan la lista de rubros con mayor informalidad. La problemática, según parece, no despierta el mismo interés en las autoridades de la Cámara de Comercio que las ferias municipales.
La recientemente aprobada ley bases, en cambio, parece generar grandes ilusiones en el presidente de la Cámara. La misma que, entre otras coas, prevé la ampliación del período de prueba de los trabajadores de tres meses a ocho. La misma que flexibiliza las condiciones para los despidos sin justa causa, elimina indemnizaciones y suaviza los castigos por tener empleados en negro. Estos y otros tantos elementos son los que hacen de Herrera y la Cámara de Comercio, las marionetas perfectas del romerato.