Los concesionarios de Costa Salguero donde murieron 5 jóvenes, son dueños de una constructora que ganó licitaciones en CABA por 190 millones. Son los que levantarán la Villa Olímpica. Las particularidades de una empresa con vinculaciones PRO.

Los dueños de la concesión del Complejo Costa Salguero no sólo tienen asegurado pagar un canon al gobierno porteño que es cien veces más bajo que el valor de mercado en la zona. Además, figuran como propietarios de una empresa constructora, Emaco SA, que ganó licitaciones de la ciudad por al menos 190 millones de pesos. Una de esas licitaciones fue para construir viviendas sociales para personas de la ex traza de la AU3. Según denunció el dirigente de Igualdad Social Facundo Di Filippo, las viviendas fueron entregadas en condiciones desastrosas. Las personas fueron trasladadas de unos terrenos donde se hizo el barrio parque Donado Holmberg, un proyecto donde el gobierno porteño puso el valor a la zona, vendió los terrenos a un precio muy bajo e inversores privados hicieron luego su negocio. Entre ellos, estaba el empresario Nicolás Caputo, amigo del presidente Mauricio Macri. Emaco hará ahora la Villa Olímpica para los Juegos Olímpicos de la Juventud de 2018.

Como informó este diario, la concesión del complejo Costa Salguero la detenta la empresa Telemetrix desde 1988 y, gracias al menemismo, la tiene hasta 2021. En una causa judicial que se le inició para que permitiera que se dejara el camino de sirga (el espacio reglamentario junto al río que debe ser público), el juez Andrés Gallardo descubrió que hasta 2009 no contaban con habilitación 19 de los locales. Ante la clausura, el gobierno porteño se ocupó de que la obtuvieran en tiempo récord. La gestión PRO tampoco quiso dar información al magistrado sobre la facturación de las empresas, pero Gallardo pudo vislumbrar en ese momento la magnitud del negocio: en 2010, Telemetrix pagaba a la ciudad 68 mil pesos por mes y se llevaba 750 mil pesos de las subconcesionarias. Actualmente, paga 263 mil pesos. No se conoce cuánto recibe de las subconcesionarias, aunque el monto es cien veces más bajo que el valor del metro cuadrado en la zona.

La principal subconcesionaria, Costa Salguero SA, es la que maneja los pabellones donde fue la fiesta electrónica. Los directorios de Telemetrix y esa empresa comparten muchos nombres y hay vínculos familiares comprobables. En la subconcesionaria figura también Fernando Polledo Olivera, marido de la vicepresidenta primera de la Legislatura, Carmen Polledo. Los mismos nombres y apellidos se repiten calcados en el directorio de la constructora Emaco SA.

El presidente es Federico Leon Bensadon, que figura tanto en Telemetrix como en Costa Salguero SA. El vicepresidente es Alberto Luis Gutiérrez, que es presidente de Telemetrix. Como directores, figuran Federico Bensadon, Gabriela Bensadon, Diego Luis Gutiérrez y Graciela Ileana Ratto. Todos son parte de Telemetrix o de Costa Salguero SA y, en algunos casos, de las dos. Por si quedaba alguna duda de la relación, Emaco SA posee el 25 por ciento de las acciones de Telemetrix.

La constructora Emaco ganó licitaciones del gobierno porteño por al menos 190 millones de pesos. Por contratación directa, le fue adjudicado el “Sistema de Extinción de Incendios del Teatro Colón” por 3 millones 731 mil pesos. Obtuvo la licitación de la obra en Hipólito Yrigoyen 932, por otros 18 millones 628 mil pesos. Además, el gobierno porteño le adjudicó las “Soluciones habitacionales Parque Donado Holmberg” por 7 millones 175 mil pesos. Esta obra tuvo cinco ampliaciones del presupuesto a partir de 2010 y hasta 2014: por esa obra, se llevó un adicional de 13 millones 629 mil de pesos.

“Emaco ganó la construcción de dos complejos de viviendas sociales y el gobierno porteño le terminó ejecutando la garantía de obra porque la construcción fue un desastre”, recordó el dirigente del Partido Social de la Ciudad Facundo Di Filippo, que inició una de las causas contra Telemetrix por Costa Salguero.

Las viviendas fueron construidas para trasladar a las personas que vivían en la ex traza de la AU3. Allí se hizo el Barrio Parque Donado Holmberg, un proyecto valorizado y financiado por el Gobierno porteño que luego fue vendido a privados por un precio muy bajo. La entonces legisladora Claudia Neira indicó que cuando se subastaron los terrenos el precio promedio fue de 3120 pesos el metro cuadrado y luego los inversores privados construyeron viviendas de hasta cinco veces la altura de las que existían en las que “los precios de venta de los nuevos edificios consta en 15 a 18 mil el metro cuadrado”. Esto represento, según indicó en su momento Neira, una ganancia extraordinaria para los desarrolladores inmobiliarios, entre los que se encontraba Nicky Caputo.

A cambio, las personas que se fueron de esa zona obtuvieron casas mal terminadas. “Los vecinos viven con filtraciones, con caños cloacales que no tienen las dimensiones correctas –advirtió Di Filippo–. Son las viviendas de Virrey del Pino y Donado. Tan mala fue la obra que el gobierno porteño dice haberle ejecutado la garantía para poder pagarle a otra empresa, que terminó la obra. No obstante, Emaco fue beneficiada el año pasado con la licitación de la Villa Olímpica”.

Es una de las obras más grandes que ganó hasta ahora Emaco, en una Unión Transitoria de Empresas con Constructora Lanusse SA, por 148 millones 823 mil pesos. Por ese monto, construirá parte de la Villa Olímpica en Lugano, que albergará a los atletas en los Juegos Olímpicos de la Juventud que se harán en Buenos Aires en 2018. “El vínculo entre el macrismo y estos empresarios es claro y establecido. No sólo por la relación de Carmen Polledo con su esposo, sino porque el gobierno porteño fue socio de Telemetrix al plantear todas las recusaciones en el camino de sirga –recordó Di Filippo–. La causa duerme hace dos años en el Tribunal Superior de Justicia, pese a que el PRO habla de Justicia independiente.”

Fuente: Página 12