El diputado provincial Guillermo Martinelli se refirió ayer al caso Julio de Vido. Aseguro que el proceso está atravesado por pasiones e intereses que asemejan a los sectores políticos del país en casi talibanes.

El legislador provincial charló ayer con el programa “Hablemos de política” que se emite por FM Aries y tras ser consultado sobre lo que sucede en el Congreso Nacional con el caso  Julio De Vido, manifestó lo siguiente: “repudio profundamente a los corruptos pero no quiero que la cámara de Diputados de la Nación se convierta en un patíbulo”.

Agrego además que para condenar a un corrupto no se puede apelar a mecanismos reñidos con lo que dispone la Constitución Nacional porque ello supondría convertirse en otro corrupto. En ese marco enfatizo que los mecanismos disponen que la cámara pueda desaforar a uno de sus miembros sólo cuando la Justicia haya concluido un proceso judicial, algo que en el caso Julio De Vido no ocurrió.

“Salvo con los talibanes, en todo el mundo rige el principio de inocencia que sólo acaba cuando la Justicia así lo dispone” enfatizo el legislador. Ahí nomás fue consultado si la política nacional se está “talibanizando” a lo que respondió: “Tal como van las cosas parecen querer empujarnos hacia ello” advirtió.