Diputados falta de timming

 

 

Una anticipada falta de timing legislativa tensó los cables con Nación y zarandeó la calma oficialista. Mucho desvelo por el desembarco en el PJ bajó la guardia de sus alfiles. En tanto, mayor ebullición es la que enfiló por una de las bandas opositoras, sin dinámica, ni autocrítica, ni recambios a la vista. El escenario político local en perspectiva.

 

Por: Federico Pérez.

 

La humildad demandada al repasar los contornos de un equívoco o un déficit fue el rasgo de esta semana, tanto para el oficialismo como en las filas de la oposición. En el primer caso, la posibilidad de poner reversa al elevado margen de maniobrabilidad policial que deberá resolver la Corte de Justicia de Salta; en el segundo, más fuerte truenan los reclamos por inacción en la sintonía con un importante sector de la ciudadanía.

Así, la nueva composición del máximo tribunal provincial tendrá en sus manos el recurso presentado por la Secretaría de Derechos Humanos de la nación que, según este planteo permitiría “ponerle un freno al aumento de la violencia institucional en Salta”. Esto, en función del análisis detallado del DNU pandemia, conocido como 255/2020 (Ley 8191), advertencia que había sido lanzada el pasado martes en Diputados.

Su envío al Legislativo provincial expresa un déficit en el criterio de sus integrantes, a la par de un debate algo más concienzudo de los asuntos de Estado, dado que la falta de oído prestada a tales fundamentos –mayormente de algunos opositores- derivó en estos chispazos con el organismo nacional. El reaseguro de tal recurso lo había insinuado la presentación del pasado miércoles, realizada por la agrupación HIJOS/Salta y la Asociación de Abogados Penalistas en la que expusieron el titular de DDHH de Nación, Horacio Pietragalla, entre otros. Un núcleo prolífico en argumentos.

La atención sobre el funcionamiento de las “cajas de resonancia” ya habían sido marcadas desde estas páginas en nuestra edición del 2 de mayo (Ver Nota “A dos velocidades: Sonidos diferentes en las cajas de resonancia”). En aquellos días, señalamos que frente a una eventual tardanza en las soluciones “que no falte foro en qué quejarse. Pero cuando falla esto último puede potenciarse el malestar”.

Tal vez, el innegable atractivo por la reestructuración de la CAP pejotista (ver artículo: “El más tiempista” en esta edición) haya impulsado un cierto desdén a las advertencias planteadas el martes hacia el 255/2020 en la sesión de la Cámara baja. Sin embargo, los asuntos partidarios no deberían descuidar los inherentes al rol que cada función exige, por ejemplo, la revisión y control de todo expediente que provenga de otros poderes o bien de la propia sociedad.

 

Para qué optar

 

Por el lado opositor, el reclamo aparece con más enjundia y tiene como causa el desamparo al que ha sometido la cúpula del Frente de Todos local a su dirigentes, simpatizantes y afiliados. En un veloz repaso lineal, son casi 220.000 salteños que en noviembre de 2019 se repartieron entre opciones de centro, centroizquierda e izquierda, que ahora padecen esta ausencia de lineamientos o posicionamiento ante los más esenciales temas de agenda.

Los dardos tienen como destinatarios a los senadores nacionales Sergio Leavy y Nora Giménez, como también a diputados como Lucas Godoy, Juan Ameri y, en menor medida, a Lía Verónica Caliva. En particular al primero, quien en 2019 copó la mesa e insistió en la sedimentación de puestos electivos –entre ya logrados y a los que aspiraba- como el de postulante a la Gobernación y a una banca en la Cámara alta. Aún conociendo que ello podría resultar un punto flaco para el armado estratégico general.

Por el trepidante derrotero en ambas contiendas (federal y provincial), Leavy fue objetivo de reclamos por su dinámica en tanto miembro de Senadores, como también en su rol como representante de esta tropa local. Además de sus flirteos con el romerismo, el cual parece situarse con mayor comodidad (ver nota “El sector agroexport en la vidriera. La presencia de la diestra”, Cuarto Poder, sábado 27 de junio) en un lado ingrato a los ojos de este segmento electoral.

En alusión a Leavy, un dirigente del FdT gaucho le propinó este jueves que “el Presidente del Partido de la Victoria en Salta se muestra diligente y expeditivo con los representantes del Macrismo y del frente ´Juntos por el Cambio´ en la provincia de Salta”. En contraste, señaló en Facebook Martín Del Frari que “no recibe, ni da audiencias a los compañeros del Frente de Todos que trabajaron en 4 elecciones donde él mismo tuvo una inentendible doble candidatura a Senador Nacional y a Gobernador, mientras era Diputado Nacional con licencia en la Intendencia de Tartagal (municipio que nuestro partido también perdió en las elecciones 2019) menos aún gestiona pedidos de diferente índole dentro de los Organismos Nacionales en Salta”.

Al parecer, el ex alcalde tartagalense parece optar por los tornillos ajustables en dirección opuesta al de las agujas del reloj, antes que a la definición más extendida  de política que estipula lo anterior y la dosifica con el contacto directo con simpatizantes. Aunque siempre estuvo en duda si tales adhesiones fueron hacia su persona o al ideario albertista o kirchnerista. Cuestión que este sector parece querer resolver, de una vez por todas.

 

 

El más tiempista

 

Cuenta con reseñas que lo empardan con aquel personaje capaz de jugar a los tackles con guepardos andando a la carrera. También con horas de lectura con las que aventaja a unos cuantos, repaso de la información de actualidad casi permanente y asesores eficientes. Este jueves, el Procurador General de la Provincia de Salta, Abel Cornejo, nombró a Verónica Simesen de Bielke al frente de la Fiscalía de Derechos Humanos.

El titular del Ministerio Público Fiscal resolvió, de tal manera, este reemplazo algo más tranquilizador momentáneamente en el sector más sensible a los reclamos del tipo que realizó la Secretaría de Derechos Humanos de la nación. Con ello, movió del foco de atención a Gustavo Alberto Vilar Rey, quien había sido blanco de innumerables cuestionamientos que le asignaban amplia contemplación con la vía libre dada a las fuerzas de seguridad provinciales.

En su legajo, la nueva Fiscal de DDHH contabiliza un desempeño en la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual que la predispone mejor con las demandas de género, aunque también con las de humanizar las investigaciones, en general. Este perfil menos rústico atribuido a Simesen de Bielke, además fue desarrollado en su desempeño en la Unidad de Graves Atentados contra las Personas. Allí, el propio Cornejo la resaltó por el desenvolvimiento en el caso de Daniela Guantay.

En particular, y más allá de los cinco condenados por el caso, en el MPF destacan el encuadre que la Fiscal se dio para explicar a los parientes de DG –principalmente a los hijos y a la madre- la significación que el caso no haya quedado impune.