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Efluvios bajo la lunita tucumana

El Sillón de la Casa de los Leones

El día de la asunción de Juan Manzur nuevamente como gobernador de Tucumán fue una fiesta pero no solo para los tucumanos sino también para los salteños que decidieron inhalar aires de triunfo que en Salta dudosamente puedan respirar por ahora. Es así que una comitiva de legisladores provinciales encabezada por el propio Manuel “Indio” Godoy llegó a Tucumán en la mañana del martes, día de la sesión. Único día que tienen que estar realmente presentes para ocupar esa banca que el pueblo les otorgó para que lo representen y de paso defiendan en algo sus intereses.

Lo recordaron a eso de las 19, horario en que se hicieron presentes en el edificio de la Legislatura. Quorum ya no había. Los diputados que si cumplieron con su obligación legislativa llegaron a las 16, horario en que se llama a sesión habitualmente y esperaron prudencialmente por dos horas. Con cara de asombro dijeron todos al unísono “¿qué, se fueron?”, como si tuvieran ganas de sesionar.

Estas cosas solo pasan en “Godoylandia”, las tierras del emplumado líder que parece instalado en una suerte de monarquía más que la presidencia democrática de un Cuerpo deliberativo provincial. “Nos da la sensación de que fuera el dueño de la cámara”, aún se escucha decir a más de un diputado que siente que es imposible aspirar a ocupar ese sillón en algún momento.

Es el caso de Javier Diez Villa quien no sólo aspira a la Presidencia sino que entiende que en la política local se tienen que producir reformas y renovaciones, para que no sea posible tener intendentes que duren más de 20 años en el poder de municipios que administran como almacén y mantienen en la postergación absoluta.

“Es necesaria la renovación en todas las instituciones políticas de Salta, porque casualmente la mayoría de los que están ocupando estos cargos, son co-responsables de lo que le viene pasando a la provincia de Salta en los últimos 20 años”, explicó en la semana que se va, el legislador.

“El domingo, Salta tiene la oportunidad histórica de elegir un nuevo gobernador después de 12 años, y en ese contexto se van a producir, se tienen que producir muchos cambios políticos e institucionales”, agregó Diez Villa, advirtiendo que desde el espacio que lidera Gustavo Sáenz, se va promover la reforma de la constitución, para que ningún legislador, ningún intendente, ningún gobernador pueda estar más de 8 años sentado en un sillón. Argumentando que la renovación es buena, es necesaria, oxigena, da agilidad y frescura; y sobre todo, lo que necesita esta provincia.

En cuanto a la composición de la Cámara de Diputados, no se sabe a ciencia cierta, cómo va ser, porque hay centésimas que pueden definir el ingreso de más o menos diputados de un sector. “Lo que sí, es necesario saber –enfatiza el diputado -es que, un diputado que responde directa y abiertamente a Leavy, que es un opositor permanente a Gustavo Sáenz, no puede encabezar el cuerpo legislativo, si Sáenz es gobernador. Es una cuestión lógica. Quien esté conduciendo la Cámara de Diputados, la Cámara de Senadores y otros organismos del Estado, debe estar absolutamente compenetrado con la Salta que viene”.

En cuanto a los nunca bien ponderados Recursos Económicos que se manejan en la Cámara Baja, Diez Villa argumentó que “efectivamente uno desconoce cuáles son los recursos que se manejan en la Cámara de Diputados. Siempre digo que aquel funcionario que esta hace más de 20 años sentado en el mismo sillón, se cree dueño de la institución, se cree dueño del sillón que ocupa, se creen dueño de la oficina, se creen dueños de la secretaria, del chofer y del auto que usan”.

El saencismo va por la cabeza del Indio. Es el primer paso. Lo siguiente es auditar todos los movimientos que esta presidencia llevó a cabo durante 20 años. Tarea para nada fácil. “Hablamos de que haya un manejo transparente y equitativo, que permita a todos los diputados, a todos los vecinos y a todos los salteños tener la tranquilidad de que la Cámara de Diputados los representa a todos”, finalizó Javier Diez Villa.