Entrevista a Isabel Gerónimo, docente que trabajó más de 30 años en los Valles Calchaquí del norte salteño, allí pudo presenciar las distintas problemáticas surgidas por la falta de información y conocimiento de los derechos sexuales y reproductivos. (Gabriela Hernández)

 

El debate por la legalización del aborto ha logrado a su vez la aparición en escena de un sector (Se creía ya fuera de discusión) que se opone fervientemente a la Educación Sexual Integral, generando conceptos discriminatorios, irreales e irresponsables, hasta violentos. Algunos docentes incluso fueron insultados o hasta casi golpeados por padres que sin tener idea de los contenidos de la materia creían que se le iba a mostrar, por ejemplo, imágenes subidas de tono a sus hijos en las clases o que se les cambiaría a gusto del docente la orientación sexual.

Escuelas rurales

Realizamos una entrevista a Isabel Gerónimo, docente que trabajó más de 30 años en los Valles Calchaquí del norte salteño, allí pudo presenciar las distintas problemáticas surgidas por la falta de información y conocimiento de los derechos sexuales y reproductivos.

Isabel comenta que por suerte no tuvo problemas con los padres del lugar (a diferencia de algunas escuelas de la ciudad) a la hora de informarles que se darían clases de ESI, es más se dio con la realidad de que muchos tenían dudas respecto a su propio cuerpo y al cómo actuar en casos de abuso o violencia de genero. Otros no pudieron aguantar la emoción al interiorizarse en la temática y recordar, las madres, casos en donde se sintieron violentadas/abusadas.

A lo largo de su carrera Isabel contó que 7 de sus alumnas atravesaron embarazos no deseados, en uno de los casos se produjo la violación de una niña de 12 años. En todos los casos se pudo contener a las estudiantes desde la escuela para que no dejen sus estudios.

“Les hablamos para evitar los embarazos adolescentes que es el principal problema de la región, prevenirlos de los abusos, ayudar a los niños a denunciar si sufrieron alguna situación complicada, a mí me resultó un tema bastante importante” comentó la docente en cuanto al compromiso que tuvieron los padres dijo “Les resultó importante porque son temas que nunca antes se habían hablado en la familia ni en el lugar, se callaron muchas cosas o se tomaban por normales otras, por lo que fueron ellos los que se ofrecían a capacitarse también en la E.S.I”

Iglesia y E.S.I.

En los pueblos pequeños hay una alta influencia de la iglesia católica, sus prácticas son tan naturales que es difícil que un habitante del lugar no haya asistido al catecismo y el que no lo hace es pseudo segregado por la comunidad, incluso si se es de otra religión, con la implementación de la E.S.I se cuestionaron algunos preceptos.

De la ciudad al campo

“Es dura la vida en el campo, una vez me tocó detener a un hombre que arrastraba de los pelos a una mujer por la ruta, es eso o ver a alumnos a los que se los inicia en el alcohol a temprana edad siempre se trata de evitar todas estas situaciones”.

En la región también hay comunidades que viven muy distanciados de todo comercio o comunicación efectiva al encontrarse en zonas de altura en medio de los cerros vallistas, algunos padres no mandan a sus hijos a la escuela por la distancia o los mandan cuando están más grandes.

Hay estudiantes cuyos padres no terminaron la escuela o solo llegaron hasta el 7mo año y luego se dedicaron a las tareas de campo, estos nunca recibieron educación sexual por lo que tienen algunos conceptos erróneos y patriarcales propios de la zona.

Marco Legislativo

La Ley Nacional 26.150 y el Programa Nacional de Educación Sexual Integral creado a partir de ella, garantizan a nivel nacional, provincial, municipal y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires el derecho a recibir Educación Sexual Integral (ESI) tanto en escuelas de gestión estatal como privada, laicas o confesionales. Incluye a todos los niveles educativos: inicial, primario, secundario y terciario no universitario y a la formación docente, adecuando los contenidos de manera gradual, de acuerdo a la edad de los estudiantes  (Fundación Huesped)