En una entrevista con Luis Majul, el ministro de Hacienda reconoció que «si el tipo de cambio se deprecia, algo de traspaso a precios hay». También aludió a la polémica por los alfajores.

El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, reconoció hoy que «evidentemente, si el tipo de cambio se deprecia, algo de traspaso a precios hay» y anticipó que la inflación de mayo será «un poquito más alta que la esperada», aunque se mostró confiado en que va a ser «más baja que la de abril».

«Evidentemente, si el tipo de cambio se deprecia, algo de traspaso a precios hay. La regla es más o menos que por cada 1% de depreciación de la moneda un cuarto de eso se traspasa a eso más o menos seis meses. Hay un impacto acotado, por supuesto», sostuvo el funcionario nacional.

En diálogo con La Cornisa, emitido por América, el integrante del Gabinete admitió que la inflación de mayo será «un poquito más alta que la esperada, pero más baja que la de abril».

Dujovne afirmó que repatrió «una parte importante» del dinero que tenía en el exterior y, tras subrayar que confía en la Argentina, resaltó que «casi todos» sus activos «están invertidos en bonos» nacionales.

«Tengo que hablar a través de mi declaración jurada. Casi todos mis activos están invertidos en bonos de la Argentina, que es lo mismo tenerlos en el exterior que en una cuenta en la Argentina», sostuvo el funcionario nacional, y anticipó que cuando se haga pública su declaración jurada en el mes de junio «se va a ver que una parte importante de ese dinero en el exterior ya vino al país en 2017».

Asimismo, Dujovne minimizó la polémica que se generó por la compra de golosinas por parte de su cartera: «Pasamos muchas horas trabajando por día en el Ministerio. Mi secretaria me pregunta si quiero algo para acompañar el té y yo digo ‘Sí, un Chocoarroz, para no engordar’. Otros ministros pedirán fruta y otros medialunas. Si tuviera que pagarlo de mi bolsillo, lo haría».

A. Roldan