Las facturas de gas que lleguen hasta octubre se podrán pagar en cuatro cuotas. El Gobierno busca moderar el impacto de la suba de este año en el invierno.
Con el objetivo de amortiguar el impacto del aumento de las tarifas de gas en los meses más fríos del año, el Ministerio de Energía, a cargo de Juan José Aranguren, puso en marcha un mecanismo para habilitar el pago en cuatro cuotas de las facturas de gas correspondientes a los meses de julio y agosto (hoy se permiten hasta dos cuotas).
El beneficio se aplicará sobre los clientes residenciales de todo el país, salvo quienes están enmarcados en la tarifa social, cuyas boletas son sustancialmente más bajas porque no pagan por el fluido.
En esa dirección, el Enargas, el ente que regula a las empresas del sector en todo el país, les enviará hoy a las compañías una nota en la que les anticipará los cambios. Luego saldrá una resolución que concretará las modificaciones del esquema de cobro.
En la práctica, el Enargas les ordenará a las compañías que les permitan a los usuarios pagar por el servicio en cuatro cuotas sin interés para todas las facturas que se emitan a partir de hoy y hasta octubre. Esas boletas comenzarán a llegar a los hogares el mes próximo.
Una fuente oficial que participó de la decisión explicó los motivos del nuevo plazo para pagar los servicios. Sostuvo, entre otras cosas, que éste es el primer invierno en el que se aplicaron por completo los aumentos de tarifas anunciados, ya que las diferentes medidas judiciales mantuvieron los ajustes del año pasado frenados hasta noviembre último.
En aquella ocasión, los usuarios pasaron el invierno -el período en que más gas se consume debido a su uso para calefacción- con las tarifas del kirchnerismo. Ahora, en cambio, se aplican todos los aumentos dispuestos por el Gobierno.
Según la interpretación oficial, la implementación de las cuatro cuotas les permitirá a los usuarios distribuir el gasto en gas mientras adaptan su conducta a un consumo más racional orientado por la nueva señal de precios.
No es la primera vez que la administración de Mauricio Macri acude a las cuotas para moderar el impacto del alza de tarifas de servicios públicos en los bolsillos de los consumidores. En mayo del año pasado, en medio de la polémica que generó el primer ajuste en los precios del gas, intentó implementar un mecanismo de financiación a través del cual los usuarios podrían pagar la mitad de los consumos hechos entre abril y septiembre entre octubre y marzo de este año. Luego dio marcha atrás, tras el fallo adverso de la Corte Suprema.
En el caso de la electricidad, en tanto, el Gobierno implementó la posibilidad de pagar las facturas de Edenor y Edesur en 48 cuotas a partir de febrero del año próximo, para no cargar las boletas de este año.
Según un análisis que hizo el Gobierno en base a los clientes de Metrogas (atiende a unos tres millones de usuarios, que representan el 37% de los usuarios del país), la mayor parte de los clientes residenciales pagará menos de $ 500 por mes por las facturas del invierno. Sin embargo, unos 150.000 clientes, entre los que se encuentran los mayores consumidores, recibirán facturas por encima de los $ 1000. En ese segmento aparecerán los números más abultados. Según la facturación de Metrogas para el último bimestre mayo/junio, el 22% de los usuarios tiene tarifa social (sólo pagan los costos fijos del servicio, pero no el gas en sí mismo) y el 93% pagó menos de $ 500 por mes.
El Gobierno también calculó cuáles serán las facturas del bimestre julio/agosto en base a los registros históricos de consumos (la demanda fue un 40% mayor a la del bimestre anterior). En ese caso, aumentarían de 2 a 4% los que pagarían más de $ 1000.
Por eso, es probable que en el actual bimestre también se multipliquen las facturas abultadas, aunque todavía abarcarán a una parte reducida de los hogares.
En el caso de Gas Natural Fenosa, un 75% de las facturas del último bimestre estuvieron por debajo de los $ 1000, según fuentes del sector.
En marzo pasado, el Gobierno anunció las nuevas tarifas del gas para este año. Según los números que se difundieron en aquel momento, las facturas tendrán incrementos del 24% promedio a nivel nacional, aunque los usuarios de Metrogas experimentarán alzas mayores: allí la suba en promedio fue del 36%.
Aranguren confirmó ayer en el Consejo de las Américas que habrá nuevos aumentos de tarifas de gas y electricidad «hacia fin de año, en noviembre o diciembre, como estaba previsto». Pero pronosticó que «[la suba] va a ser muy por debajo de lo que ya se hizo. El impacto en el bolsillo de la gente va a ser mucho menor», en comparación con el año pasado, completó.
Fuente: La Nación