La Secretaría de Cultura de la nación publicó un Atlas que ilustra el mapa cultural en el que se inserta Salta: estructura concentrada en la capital; menos papel y más portales web; mucha zamba; muchas misas; bastante cine; y predominio absoluto del grupo Clarín entre los abonados al cable.  (Federico Anzardi)

En el mes de abril se publicó el Atlas Cultural argentino, creado por el SInCA (Sistema de Información Cultural de la Argentina) en el año 2006 y que depende de la Secretaría de Cultura de la Nación. El Atlas es uno de los proyectos centrales del SInCA y con él se intenta “reflejar la diversidad constitutiva de nuestra cultura, los matices, las particularidades y las diferencias”, y también lograr “hacer foco en las asimetrías, las disparidades y las carencias para repararlas”.

El análisis de nuestra región ocupa treinta de las 236 páginas del Atlas. La introducción asegura que el NOA “presenta una estructura territorial concentrada en las cabeceras político-administrativas de cada provincia”. Es decir que la mayoría de las actividades y eventos culturales principales, al igual que sus habitantes, se concentran en las capitales. Posee una superficie territorial de 559.864 km2 y la población actual es de 4.911.412 habitantes. Representa el 7% del PBI del país, lo que significa alrededor de 30 mil pesos anuales por habitante. Tiene un 16% de hogares pobres, uno de los valores más altos del país.

Del éter a la web

radio

Al ser una región centralizada en sus grandes ciudades, la radio es el medio más presente en pequeñas y medianas localidades, algo que ocurre en todo el país. Los diarios y canales de televisión poseen una influencia provincial y regional.

El análisis de los periódicos en el NOA muestra que el más leído es el tucumano La Gaceta, con un 36% de lectores. A pesar de su liderazgo, el histórico matutino viene decayendo en números desde 1970. La baja se debe, en parte, a que un 19% de la población que los lee, lo hace a través de Internet, aunque no de manera exclusiva. Distinto es el caso de El Tribuno, que sumando sus ediciones de Salta y de Jujuy, logra mantener su tirada y ocupa el segundo puesto de la lista, con el 30%. El Nuevo Diario de Salta se ubica en el último lugar (9º), con un 3%, igual que Clarín, el único diario no regional que aparece en la lista.

Los sitios informativos sin soporte de papel son una alternativa novedosa en la región que todavía no cosecha tantos lectores como los medios con mayor tradición. El Atlas define a estas páginas web como posibles potenciadores de identidad local y de democratización de la palabra. Al igual que las radios, se estarían transformando en voces representativas de comunidades más pequeñas. “A medida que se masifique el acceso y uso de nuevas tecnologías e Internet, estos medios seguramente cobrarán mayor protagonismo en la región”, asegura el informe.

Al respecto, el Atlas asegura que la expansión de las conexiones de Internet en el NOA ha evidenciado un crecimiento geométrico: más de 17 veces durante el período 2001-2012, tomando como promedio el crecimiento de las seis provincias que componen el NOA. La cifra sólo es superada por el crecimiento en el NEA: 1.844% durante el mismo período.

Divina TV Führer

tv

Los datos que ofrece el Atlas Cultural de la Argentina sobre los alcances y el consumo de la televisión en el NOA muestra diferentes realidades, según las provincias. Nuestra región es la de mayor retransmisión de contenidos del país. Posee apenas un 19% de producción local. Según el informe, se debe a que “la concesión de dos importantes canales ubicados en las ciudades más pobladas, San Miguel de Tucumán y Salta, pertenecen al multimedio Telefé que retransmite mayormente contenidos desde su señal de cabecera. La provincia de Catamarca carece de canal de TV propio, pero recibe a través de dos repetidoras, una de las cuales está en manos del Estado catamarqueño, la señal del canal de Santiago del Estero, curioso fenómeno de integración interprovincial”.

La televisión por cable que se transmite en el NOA está muy descentralizada desde el punto de vista económico, a excepción de Salta, donde casi el 100% de los abonados son de Cablevisión. El caso opuesto es Jujuy, cuyo mercado se distribuye entre cableoperadores distintos de las grandes empresas nacionales. En Salta, la TV paga penetra en más de 200 mil hogares, un 70% del total provincial.

La reciente Televisión Digital Abierta (TDA) alcanza un amplio nivel de cobertura en la región con ocho antenas, transmiten para el Gran San Fernando del Valle de Catamarca, Gran Jujuy, La Rioja, Gran Salta, Santiago del Estero-La Banda y Gran San Miguel de Tucumán. Son 2.553.351 habitantes que reciben la señal, lo que representa al 52% del total.

Cine y libros

cine y libros

Todas las provincias del NOA poseen salas y complejos de cine, con un gran porcentaje en las capitales y ciudades más pobladas, tal como lo marca la tendencia general. Salta encabeza el promedio de asistencia con un promedio de 650 cada mil habitantes. También la lista de espectadores anuales: 800 mil.

Con todo, la asistencia al cine en la región es menor que el promedio nacional, que exhibe una cifra de 1066 espectadores cada mil habitantes. El promedio en el NOA es de 698 espectadores.

En cuanto a los libros y el mercado editorial, la tendencia centralizada se mantiene. Salta y Tucumán absorben el 56% de los ejemplares publicados en la región: 180 mil en Salta, 170 mil en Tucumán. Tercero, muy lejos, aparece Jujuy, con apenas 30 mil. Último, La Rioja, con menos de 10 mil. La cifra, traducida en ejemplares cada mil habitantes, mantiene a nuestra provincia en el primer lugar, con 150. Siguen Tucumán (120), Jujuy (45), Catamarca, que no alcanza los 40; Santiago del Estero y La Rioja no llegan a los 20.

Las ciudades de Salta y de San Miguel de Tucumán se destacan como centros libreros y principalmente editoriales, contando también con una gran cantidad de bibliotecas especializadas. Algunas ferias del libro se realizan en localidades pequeñas: en Salta ocurre en Cafayate (“evento ligado a su potencial turístico”, aseguran en el informe), en las localidades catamarqueñas de Alijilan y Recreo y en Chamical, en La Rioja, “las cuales se suman a las más concurridas ferias del libro organizadas en las capitales provinciales”.

El informe explica que la gravitación regional que tienen las universidades nacionales de Salta y Tucumán seguramente está relacionada con la fortaleza de este sector. “Si bien las otras ciudades capitales, La Rioja, San Fernando del Valle de Catamarca, San Salvador de Jujuy y Santiago del Estero, producen sólo el 16% de los ejemplares, conjuntamente acumulan casi la mitad de los títulos editados de la región. Se podría sostener la siguiente hipótesis: el acento productivo y comercial es más fuerte en las grandes ciudades, y en las intermedias la actividad editorial favorecería la bibliodiversidad local.”

Gestión cultural

El Atlas asegura que en gestión cultural, el NOA “se caracteriza por exhibir, en algunos casos, un alto grado de ejecución presupuestaria en cultura, situándose cerca al promedio nacional y hasta superándolo a veces”. Salta se destaca en este aspecto con un presupuesto cultural anual por habitante que ronda los $70 (cálculo basado en el presupuesto provincial del 2012), superando el promedio nacional. Durante ese período, el presupuesto destinado a Cultura en Salta, según el Atlas, supero los 80 millones.

Además, aclara que la evolución del presupuesto dedicado a cultura en Salta es “marcadamente creciente”, y que se debe a dos cambios institucionales de consecuencias importantes a nivel presupuestario: el paso de secretaría a ministerio, en 2008, y la nueva denominación, en 2011, en la que el área de cultura toma mayor relevancia como Ministerio de Cultura y Turismo. “Estos cambios institucionales trajeron aparejados aumentos en las partidas presupuestarias, que en 2008 aumentaron casi un 30% respecto al año anterior, y entre ese año y 2011, alrededor de un 35%”, asegura el Atlas.

Agrega que el caso de nuestra provincia, junto con el de La Rioja, de proceso similar, da testimonio “acerca de cómo se entrelaza la dimensión institucional con la económica y de qué manera las subas de rango institucional se traducen en avances concretos que otorgan un mayor margen de acción a los organismos de cultura al disponer de mayores recursos económicos y políticos”.

Si se analiza cada provincia del NOA, se puede percibir que sólo Salta incluye a la cultura dentro de un ministerio, y es casi la única que lo hace en conjunto con el turismo, uno de los factores más importantes a la hora de ingresos en la región. Tucumán tiene el Ente Cultural que depende de la Secretaría General de la Gobernación. Catamarca y La Rioja, una Secretaría de Cultura. Jujuy posee una Secretaría de Turismo y Cultura, pero en 2012, su presupuesto anual fue aproximadamente de 12 millones y menos de 20 pesos per cápita. Santiago del Estero, con una Subsecretaría de Cultura, se ubica cómodamente en el último lugar, con un presupuesto anual menor a los 10 millones y apenas 10 pesos per cápita.

El presupuesto nacional para la cultura en el año 2012 fue de 1100 millones, con un ingreso per cápita de casi 30 pesos. Se muestra con claridad cómo el presupuesto per cápita de Salta lo supera ampliamente. Habría que analizar cuánto de ese ingreso corresponde realmente a la cultura y cuánto es motivado por el turismo, una de las patas fundamentales del gobierno de Juan Manuel Urtubey.

Respecto a las leyes culturales de cada provincia, el Atlas muestra que en Salta hay menos de veinte, posicionando a la provincia en el anteúltimo lugar de la región, apenas por encima de Santiago del Estero. En el NOA, Catamarca lidera esa lista, con más de cuarenta leyes. A nivel país, Mendoza está a la altura de la cifra que posee el Estado: 55.

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Una cuestión de fuente

El trabajo se realizó delimitando al país en seis regiones culturales: Centro (Entre Ríos, Córdoba y Santa Fe), Cuyo (San Juan, San Luis y Mendoza), NOA (Salta, Tucumán, Jujuy, Santiago del Estero, La Rioja y Catamarca), NEA (Formosa, Misiones, Chaco y Corrientes), Patagonia (Río Negro, Neuquén, Chubut, La Pampa, Santa Cruz y Tierra del Fuego) y Buenos Aires (CABA y Provincia de Buenos Aires). Fue armado tomando diversas bases de datos como el último Censo Nacional, los presupuestos provinciales, boletines culturales, el INDEC, organismos de cultura de todo el país, la Encuesta Nacional de la Lectura, la Encuesta Nacional de Consumos Culturales y la elaboración de la Cuenta Satélite de Cultura.

Cada provincia aportó enlaces designados por los organismos culturales locales. Ellos trabajaron la información de cada territorio. En Salta, la encargada fue María Victoria Valle. Para Rodolfo Hamawi, Director Nacional de Industrias Culturales, fue clave contar con los datos que arrojaron las dos ediciones del Mercado de Industrias Culturales Argentinas (MICA) y los seis PreMICA (encuentros regionales), experiencias que “potenciaron la generación de conocimiento y la interacción entre las provincias, y constituyeron vidrieras donde mostrar la producción cultural, las identidades locales y las manifestaciones artísticas de cada lugar”.