Una joven de 21 años, de la localidad de La Merced, denunció que Natalia Wayar, hermana del intendente y asesora legal del municipio, la despidió sin motivo alguno, incurriendo en insultos y discriminaciones por su edad. Según denunciaron otros vecinos, no es la primera vez que Wayar tiene este tipo de actitudes.
Tatiana Leiva es una joven de 21 años que vive en La Merced y se desempeñaba como empleada del Registro Civil, hasta que Natalia Wayar, hermana del intendente de ese municipio, y a su vez, asesora legal, la despidió. Según denuncia, Wayar la habría descalificado por su edad, a los gritos, y la habría acusado de conseguir el puesto por vínculos con el exintendente de la localidad.
El hecho ocurrió, según cuenta Leiva, en diciembre del año pasado, cuando en medio del reclamos de 42 trabajadores municipales despedidos, le llegó una nota, no un telegrama formal, en donde se la desvinculaba de su puesto, sin mediar razones justas.
Cuando la joven se disponía a dejar las llaves de la oficina del Registro Civil, tuvo la oportunidad de conversar con Natalia Wayar, quien le pidió su documento para constatar su edad, la acusó de mentirosa y la amenazó con que nadie la defendería del despido, puesto que Leiva no era parte de ningún sindicato.
En ese momento, la joven radicó la denuncia en el Ministerio de Trabajo, bajo la carátula de violencia laboral. No obstante, la persecución hacia la muchacha no terminó ahí: mientras Natalia Leiva siguió desarrollando sus tareas en las oficinas del Registro Civil, otra persona vigilaba lo que hacía, según manifiesta la denunciante.
Un prontuario poco feliz
A raíz del hecho que tomó relevancia pública, salieron a la luz otros hechos que dejan mal parada a la asesora legal del municipio. Cuando la mujer se desempeñaba como mediadora en el Ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos, tuvo que renunciar por polémicas declaraciones respecto de la violencia de género: para Wayar, la problemática no existe como tal, y que se trataba solamente de “personas que no sabían solucionar sus problemas de manera pacífica”.
También manifestó que había mujeres que hacían denuncias falsas, y que los hombres también eran maltratados. Graves dichos si se tiene en cuenta que los femicidios van en aumento, y cada 23 horas una mujer pierde la vida a causa de la violencia de género. Luego del suceso, a la mujer se le inició un sumario.
Mientras tanto, el reclamo de los trabajadores municipales despedidos de La Merced continúa, y Natalia Wayar ha tenido un rol poco feliz. Según denuncian los extrabajadores, tanto el intendente como la asesora legal habrían llamado a Gendarmería para que quienes reclamaban por su reincorporación fueran expulsados de las puertas del municipio.