Aseguran que el “Leavinismo” sigue perpetuándose en el poder a través de maniobras fraudulentas e inconstitucionales.

A través de un comunicado difundido por redes sociales desde UCR Tartagal aseguran que siguen fiel a su oposición a los Leavy’s pese a que el hermano del diputado nacional Sergio Oso Laevy siga de intendente interino sin haberse llamado a elecciones.

A continuación compartimos el comunicado de los concejales de la UCR que da cuenta de la situación:

Lo difícil de hacer las cosas de manera correcta:

Genera entre gracia y bronca quien hasta ayer era el más acérrimo defensor del Leavismo hoy te corra con la vara de la justicia, cuando disfruto de las mieles del oficialismo.
Desde hace un par de semanas que el Concejo Deliberante no sesiona por una pelea intestina en el oficialismo por no haber cumplido con la promesa de darle al concejal Arias la Vice presidencia del Concejo, para llegar a la presidencia del mismo, ya que el presidente pasaría a usurpar el puesto de intendente interino. Esa promesa fue conseguida a fines de marzo de 2018 donde en una maniobra similar se abstuvo de votar las autoridades del concejo. Este año se revela al poder que no le da la presidencia y arma su propia lista, llevando a Chanchin Leavy, que hoy desconoce, como presidente del mismo, reconociéndolo todavía como su jefe político.
Nosotros fieles a nuestra postura presentamos nuestra lista, armada solamente por concejales Radicales. En ese momento si se quería la verdad de todas estas cuestiones podría haber votado nuestra lista de autoridades, pero eligió llevarlo a quien hoy denuncia como usurpador de un cargo, pidiendo su destitución al citar el artículo 16 de la Carta Orgánica. Casualidades de la vida, es el artículo que nosotros citamos para justificar el pedido de elecciones para Intendente cuando Sergio Leavy pasó a ser diputado y pidió licencia. Denunciamos el doble cargo, que hizo el Sr. Arias? Obviamente defender a su entonces jefe político.
Por alguna cuestión en estos días fue subiendo la apuesta. Primero acusó al Presidente del Concejo, Luis Hid de malversación de fondos. Pasó a denunciar luego de corrupción a funcionarios del ejecutivo municipal, oliendo sangre y sabiéndose cerca del poder. Cerca de un poder, o un municipio que a las claras muestra falta de liderazgo, falto de gestión, con un Tartagal carcomido por la suciedad y la dejadez que trajo como consecuencia que tengamos el Brote de Dengue más importante de los últimos años, en resumen, el clásico ejemplo de un Estado Ausente. El concejal que entró casi por la ventana con escasos 2000 votos pedía el apoyo de radicales para ser el Intendente que le diera luz a una gestión municipal ya ensuciada por sucesivas denuncias y hechos que no paran de generar mantos de sospecha.
Ridículamente, desconociendo lo hecho en la Sesión Preparatoria, pide la nulidad de la misma. No hay necesidad alguna de pedir la nulidad para elegir autoridades del Concejo, basta con levantar la mano y pedir que se realice el cambio con una simple moción. SR PRESIDENTE, #MOCIONOEL CAMBIO DE AUTORIDADES DEL CONCEJO DELIBERANTE.
No solo no es necesaria la nulidad, si no que en su propio proyecto el mismo pone:
QUE, ANTE LOS GRAVES HECHOS ES RESPONSABILIDAD DE ESTE CUERPO INFORMAR Y SOLICITAR LA NULIDAD ABSOLUTA A LA#CORTE ELeCTORAL DE LA PROVINCIA DE SALTA Y ELEVAR A LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA. (Creando en su Dodylandia una Corte Electoral)
Nosotros actuamos en consecuencia, mocionamos lo que creíamos correcto ante la Carta Orgánica y el Reglamento Interno. Y esta decisión fue tomada bajo la responsabilidad de los 4 concejales.
NO hace falta pedir la nulidad y por último, poner al concejal Arias para que descubra los chanchullos del municipio es como ponerlo al de Bolso del Convento López a dirigir de nuevo Obras Públicas.
Esto simplemente es miedo porque saben como terminan las elecciones.
Hacer las cosas bien no es fácil cuando estamos acostumbrados al caos, a que se acortan camino. Rechazamos rotundamente las versiones que hacen correr los que creen que somos lo mismo, no arreglamos con nadie, salvo con nuestra conciencia y con nuestros votantes.