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Con tufillo a descomposición

El abogado defensor de una agente policial que denunció violencia de género en la institución policial afirmó que en el norte hay mandos vinculados con las drogas. Señaló al Jefe de la Unidad Regional 4, Juan Carlos Míguez.

El abogado que emitió las graves acusaciones es también un expolicía. Se trata de Pablo Cardozo Cisneros quien es patrocinante de la agente Yanina Gay, la joven que la semana anterior denunció por acoso laboral y violencia de género al jefe de la Unidad Regional N´ 4 con asiento en Tartagal, Juan Carlos Míguez.

Cardozo fue entrevistado por el diario El Tribuno que en su edición de hoy publicó las graves acusaciones. El letrado aseguró que la persecución a su defendida y a otros policías obedece a que «gran cantidad de suboficiales, oficiales y jefes que prestan servicios en la Unidad Regional 4 conforman una banda dedicada al narcotráfico”. En ese marco precisó que «la agente que denunció al jefe de la Unidad Regional 4 no es la única que sufre acoso y hostigamiento de todo tipo”.

Con respecto a las cuestiones vinculadas a violencia de género sostuvo que «la mujer dentro de la Policía es un objeto, una cosa, blanco de las apetencias de los jefes. Pero cuando una mujer denuncia estas situaciones es blanco del hostigamiento por parte de toda la estructura policial, incluidas algunas mujeres que ocupan cargos superiores».

Pero eso no fue lo único que dijo al matutino salteño porque también resaltó que en el caso de la agente Gay “todo se produce porque hay una clara intención del jefe de la Unidad 4 de proteger a dos suboficiales de apellido Romero, una de las cuales es pareja del policía Sebastián Ortiz, prófugo por narcotráfico». Cardozo fue más allá y detalló que «otra comisario -superior de las hermanas Romero- es familiar directo del profugado Ortiz y a su vez esposa de un hombre muy peligroso que tiene vínculos con esta actividad delictiva».

El letrado recordó que «todos ellos son oriundos de la zona de Acambuco, lugar donde en el mes de agosto se produjo un serio incidente con gendarmes que sorprendieron a Ortiz y otros policías con una carga sospechosa». De allí que no dudará en enfatizar que existe una cadena de complicidades conocida por muchos efectivos de la Policía de la Provincia que viene desde hace mucho tiempo.

La entrevista culminó con una sentencia alarmante.»Tengo clara la situación: existe una red de narcopolicías integradas por comisarios, oficiales y suboficiales de la fuerza que cuando detectan a alguien que conoce más de la cuenta se las arreglan para perseguir, amedrentar y hasta exonerar de la Policía si es necesario», concluyó Cardozo.