Urtubey podría manejar una caja de $2,5 mil millones de las provincias. Es el Consejo Federal de Inversiones que tiene al mismo presidente hace 30 años. Gobernadores de Cambiemos y peronistas dialoguistas impulsan al salteño que es resistido por los K.

El CFI, lugar habitual de reunión de los gobernadores peronistas, está a cargo desde 1987 por el ingeniero Juan José Ciácera, que llegó a la secretaría general del organismo por un acuerdo del peronismo y la UCR. Nacido en Mendoza, a Ciácera se lo conoce como el Julio Grondona de los gobernadores porque nunca fue removido de ese organismo que para el año que viene habrá recibido de las provincias más de 7 mil millones de pesos en aportes en sólo cuatro años, extraídos de un porcentaje de la coparticipación federal.

Según el portal La Política Online, el Gobierno de Mauricio Macri puso la lupa desde hace meses en este organismo que no es auditado por organismos de control, pese a que maneja fondos de las provincias. Sólo el año que viene, el CFI recibirá más de 2,5 mil millones de pesos de todas las provincias, a excepción de San Luis y la CABA, que no aportan un peso.

Ciácera fue respaldado históricamente por los gobernadores peronistas y siempre resistió los intentos de los gobiernos que buscaron removerlo. Es que para eso los dos tercios de las provincias tienen que estar de acuerdo.

Como la Rosada no tiene potestad para correr a Ciácera, impulsa a Urtubey para tomar el control del organismo desde adentro, con el apoyo de los gobernadores «dialoguistas» del peronismo y de los mandatarios de Cambiemos, que también aportan al CFI.

La resistencia la encabezan José Luis Gioja y Gildo Insfrán, el actual presidente del organismo, cuyo cargo es honorífico puesto que la firma es del secretario general. Gioja, en tanto, fue quien acercó a Ciácera al kirchnerismo, luego de que Néstor Kirchner intentara lo mismo que ahora busca Macri.