El objetivo de remontar en busca de los casi 320.000 votos que quedaron en la gateras el domingo pasado cuentan con voluntarios bien predispuestos a realizar dicha tarea, en el Frente de Todos de Salta. Claro que sólo con las ganas, a lo mejor no sea suficiente, en un contexto en el que está ponderado el predicamento sobre el electorado. Por ahí va el déficit que tuvo la dirigencia del partido increíblemente denominado Felicidad.
Su titular, Mauro Sabbadini, adelantó el fin de semana pasado que esta agrupación apoyaría a quien, luego de las primarias del 6 de octubre, resultase ganador por este espacio. En este contexto, se entiende que el respaldo irá a parar a la postulación de Sergio Leavy para la Gobernación, si bien esta acción deberá ser cuantificada.
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El resumen de los datos emanados del Tribunal Electoral de la provincia de Salta, precisó que los candidatos de la fuerza dirigida por el ex funcionario municipal anduvieron algo torcidos en la pesquisa de electores. Por ejemplo, la candidata a diputada provincial por Capital, Carolina Romano Buryaille, no consiguió hacer piso y apenas si sumar 1564 sufragios.
De manera casi idéntica, su candidato a concejal, Eduardo Robino, tampoco logró trasponer el umbral electoral requerido en la ley de Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias, con sus 1723 votos. Por lo cual la adhesión parece estar, si bien como dice la canción de Roque Narvaja, “La Felicidad”, muchas veces se muestra esquiva.
