La diputada votó en contra de la legalización del aborto. Se mostró irritable tras la aprobación en la cámara baja nacional. Antes, había publicado un tuit desde una capilla: «No es necesario hablar» dijo la legisladora.
Algunos dicen que Elisa Carrio tiene serios problemas psicológicos: se la nota irritable, tiene frases delirantes, la mirada perdida, entre otras características que dan cuenta de su desequilibrio.
Durante el tratamiento del proyecto que planteaba la legalización del aborto, la legisladora estuvo ausente y desde una capilla donde se fotografió y subió a su cuenta de twiter, dijo: «No es necesario hablar, solo la oración que es la debilidad de Dios y el poder de los hombres».
Así, con ese tuit, se expresó en la noche del martes. Al finalizar la votación, donde la interrupción voluntaria del embarazo fue aprobada por 129 a 15 votos, y mientras hablaba el diputado Daniel Lipovetzky, Carrió advirtió a viva voz: «Que le quede claro a todo Cambiemos, la próxima rompo».
La líder de la Coalición Cívica se levantó de su banca enojada, miró hacia sus compañeros de bancada y lanzó otra advertencia: «Es el último esfuerzo que hago para preservar la unidad».