«¿Cómo acceder a espacios que priman lo económico por sobre el compromiso y la cultura?», se pregunta la actriz Cristina Idiarte.
La actriz Cristina Idiarte utilizó sus redes sociales para denunciar la cancelación de la presentación de su obra «A por la Tercera» por parte de la Fundación Salta. El anuncio de la cancelación llegó a tan solo dos días de la fecha prevista para la función, lo que ha generado una fuerte reacción por parte de la comunidad cultural.
Idiarte, en representación del elenco y equipo de producción de la obra, emitió un contundente testimonio en el que expresó su rechazo al accionar de la Fundación Salta. El comunicado critica la cancelación repentina de la función, luego de haber solicitado y reservado la fecha del 31 de agosto con suficiente anticipación, incluso presentando una nota formal el pasado 10 de julio.
La actriz enfatizó que la cancelación no solo implica un inconveniente logístico, sino también un desafío económico para todo el equipo involucrado en la producción. Cambiar la fecha implicaría modificar la gráfica, medios de difusión y reorganizar la logística técnica y de transporte, lo cual representa un costo significativo.
La situación se volvió aún más tensa cuando la Fundación Salta propuso un cambio de fecha basado en la cantidad de entradas vendidas, insinuando que la movilidad de la fecha estaría sujeta a la demanda del público. A pesar de esta propuesta, el equipo de la obra insistió en mantener la fecha originalmente acordada.
El giro más inesperado llegó cuando la Fundación Salta alegó que un error había ocurrido, ya que habían alquilado la sala para un congreso que había pagado por adelantado. Este argumento fue lo que finalmente llevó a la cancelación de la presentación, dejando al equipo de «A por la Tercera» en la incertidumbre y la frustración.
El testimonio de Cristina Idiarte resalta la lucha que enfrenta el mundo cultural en medio de la predominancia de intereses económicos sobre el compromiso cultural y artístico.
«En tiempos donde la cultura del encuentro, en este caso el teatro, se ve amenazada por el avance de otros medios de alcance masivo indiscriminadamente, donde prima lo monetario, donde no se respetan palabras ni compromisos, donde no se valora el trabajo cultural, un escenario vuelve a convertirse en trinchera y resistencia», escribió Idiarte en Facebook, donde añadió: «Advertimos a la comunidad cultural toda este accionar para no ser víctimas del juego inescrupuloso de poner el valor económico por sobre la soberanía cultural. Soberanía que sostenemos los hacedores culturales pero también el público y la comunidad toda. Sin una política cultural en defensa de los trabajadores de la cultura, la vara la impone el negocio de los teatros rentados. ¿Cómo sobrevivimos a esa debacle? ¿cómo hacer frente a la industria de la cultura? ¿Cómo acceder a espacios que priman lo económico por sobre el compromiso y la cultura?
Las ideas no se matan, la cultura resiste. Como trinchera y como golpe. Acá estamos de pie aún.»