Con obras en su mayoría mal ejecutadas, la intendenta montó una pequeña puesta en escena para hablar de ciclovías. Lo único nuevo, aunque no se sabe cuando se implementará, son créditos para comprar una bici.

Aunque la ciclovía de calle Alvarado todavía parece un camino en el que ni un experto en bicicross podría salir indemne, ayer Bettina Romero montó un mini show para hablar de bicicletas y transportes sustentables.

Por supuesto que no dijo nada sobre como un salteño debe hacer para pedalear por Alvarado antes de llegar a Catamarca, que por cierto parece recién bombardeada; sino que armó un show aparte, como si las palabras pudieran ser más importantes que las obras.

Dijo que hará más ciclovías (esperemos que además las haga mejor), que habrá un plan de estímulo fiscal para comerciantes del rubro, talleres de capacitación para emprendedores bicicleteros, un plan de impulso al comercio bici amigable y promoción de circuitos de cicloturismo.

Todos pensaban que María Eugenia Angulo, Secretaria de Desarrollo Urbano, iba a explicar el desastre que hicieron hasta ahora, sin embargo, poco y nada dijo. Solo un saludo y formalidades.

La funcionaria llegó incluso a salir de su cuenta de Twitter el fin de semana, evidentemente, cansada de que le llovieran críticas por el estado calamitoso de calle Alvarado.