Los trabajadores de televisión están negociando sus salarios con los empresarios del cable, entre ellos el Grupo Clarín. El sindicato pretende un 42% de aumento. El sector de propietarios se mantiene firme en rechazar tal petición. (Franco Hessling)

Además de Cablevisión, que implica al Grupo Clarín, la Asociación Argentina de Televisión por Cable (ATVC) está compuesta por otros magnates del sector como Daniel Vila y José Luis Manzano, quienes en la provincia son propietarios de Salta Cable Color. Además, a la ATVC la conforman Supercanal, DirecTv y Telecentro, entre otros. La asociación reniega del pedido de los trabajadores, nucleados en el Sindicato Argentino de Televisión, Telecomunicaciones, Servicios Audiovisuales, Interactivos y de Datos (Satsaid).

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La paritaria se inició hace alrededor de un mes, en aquel entonces la ATVC ofreció un 28%, muy por debajo del 42% que requiere el Satsaid y que el ministro de Hacienda y Finanzas nacional, Alfonso Prat Gay, admitió como la alícuota de inflación proyectada para el presente año. En razón de ello, las asambleas de trabajadores de televisión cristalizadas en un cónclave de referentes de las seccionales, resolvieron no atemperar la solicitud y avanzar en un plan de lucha.

Por decisión en un plenario de secretarios generales de todas las seccionales del país, se resolvió convocar a un paro por 24 horas para el 20 de julio. Ni bien enterado de esta decisión, y con presurosa vocación de servicio, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, convocó a una inmediata conciliación obligatoria. La acción significó, además de una instancia de mediación, la restricción al derecho a huelga que los trabajadores pretendían ejercer.

La instancia de diálogo impuesta por la cartera nacional titularizada por Jorge Triaca, redundó en la renuencia de los empresarios a reconocer que, efectivamente, la inflación reconocida por el propio Gobierno nacional es prácticamente supera el cuarenta por ciento. Si se proyecta una inflación de al menos el 42%, para no deteriorar el poder adquisitivo, lo correcto sería poner el aumento salarial por encima de ese porcentaje.

Ante la firmeza de los trabajadores en defender esa lógica, la ATVC se vio impelida a ceder concesiones que acerquen su oferta a la pretensión defendida por el gremio. En la última audiencia celebrada el martes pasado, el sector propietario de los medios de producción ofreció, de manera informal, un aumento del 35% en dos cuotas, una del 20% retroactiva a julio y la otra con el 15% restante en noviembre.

Además, ofrecieron una suma fija de 9.600 pesos que se pagaría en cinco tramos, siendo la última cuota en marzo del año próximo. Esos casi 10 mil pesos se dividirían de la siguiente forma: $4000 retroactivos a julio, $2600 en noviembre, y tres porciones de mil cada una, divididas en los primeros meses del 2017.

“Esta propuesta, si bien no fue plasmada formalmente en el acta del Ministerio de Trabajo, fue rechazada por el Satsaid por considerarla insuficiente. Ante la falta de una propuesta que podamos considerar, nuestra organización retomará las medidas de fuerza anunciadas que fueron suspendidas por la conciliación obligatoria”, anticiparon desde el gremio.

El martes de la semana que viene vence la prórroga de la conciliación obligatoria. Si ATVC no mejora su oferta, el Satsaid retomará la línea de acción que había sido determinada en el plenario nacional de secretarios generales. El primer paro sería por 24 horas y se convocaría para el próximo jueves 18 de agosto. De persistir el desacuerdo, la semana subsiguiente el paro sería de 48 horas, el 23 y 24 de agosto.

La voz gremial

“Sabemos que esto es una negociación, no somos tercos, así como ellos tienen que subir nosotros podemos bajar un poco nuestras expectativas iniciales, pero con coherencia, no se puede bajar muchos puntos y menos con el panorama económico que estamos viviendo”, le afirmó a Cuarto Poder el secretario general de la seccional Salta del Satsaid, Gabriel Edmundo San Juan.

Reconoció que con una oferta del 39% estarían dispuestos a considerar la aceptación, aunque en plena consciencia de que estarían relegando puntos que hacen a su poder adquisitivo y que se estaría erosionando el valor real de los salarios. No obstante, el referente resaltó la necesidad de tener una posición tendiente al consenso, aunque sin afectar seriamente la propuesta original.

“Como viene el contexto político, el año que viene las paritarias van a ser aún más duras por eso este año tenemos que mantenernos lo más firmes posibles y no perder muchos puntos sobre los porcentajes en los que está la inflación”, señaló el dirigente sindical y añadió que “estamos peleando para que no sea imposible acceder a la canasta familiar, no para enriquecernos”.

En cuanto a la posibilidad de una medida de fuerza para la semana próxima, San Juan expresó que “todos sabemos que cuando vamos al paro corremos riesgos, aún más en el actual escenario del país, pero también se trata de una cuestión de dignidad, pelear por lo que es justo”, acotó también que “la dignidad es lo que le enseñamos a nuestros hijos, no dejarse pasar por adelante”.

Injustificable

La renuencia de ATVC al anhelo del sindicato se argumenta por una incierta situación económica a raíz de los trajines que sufrió el país con el recambio de los rumbos financieros, bursátiles y monetarios, desde diciembre pasado. Paradójicamente, tanto la patronal como el sector trabajador utilizan el panorama económico para argüir sus sendas posiciones.

De todos modos, independientemente de la plataforma argumentativa que en ambos casos se soporta en interpretaciones de los rumbos de la hacienda nacional, no puede desconocerse el pasar que tienen los empresarios del sector. Es un elemento clave para analizar las posibilidades de cumplir con los requerimientos de los trabajadores.

En ese sentido, San Juan remarcó que “las empresas están ganando plata, porque cuando uno ve que al empresario le está yendo mal, piensa en colaborar, ayudarse mutuamente, pero ese no es el caso actual”. Tal cuestión queda demostrada en el movimiento de activos que tiene Cablevisión, la principal referente de ATVC, quien concentra a la mayor parte de los empleados del circuito cerrado de televisión.

“Compró Nextel y se encuentra en conversaciones con Telecom, el negocio para ellos es totalmente rentable en estos momentos”, agregó al respecto el secretario general del Satsaid en Salta, adonde cuenta con aproximadamente 500 afiliados.