Un menor de tres años fue uno de los diez heridos tras el enfrentamiento entre la Policía y un grupo de trabajadores de Morillo. Ocurrió esta madrugada. Balazos de goma y dos uniformados quemados.
Diez personas resultaron heridas tras un enfrentamiento producido esta madrugada entre la Policía y trabajadores de Morillo. Entre ellos, un niño de tres años.
El hecho ocurrió tras la protesta de los trabajadores, todos pertenecientes a comunidades originarias de la zona. El conflicto se originó debido al incumplimiento en el que habría caído la empresa Vertúa, que se había comprometido a realizar contrataciones que no se concretaron.
Según informó La Gaceta, cuando los que hoy protestan asistieron a la empresa para empezar a trabajar como estaba previsto, se encontraron con que sus puestos habían sido ocupados.
Los incidentes también dejaron a dos policías rociados con combustible y quemados.