El presidente de Aguas del Norte, Lucio Paz Posse, reconoció que la mitad de las cloacas van a parar al río Arenales. “La gente no se debe bañar ni tomar agua de ahí porque son aguas servidas”, dijo.

Según comentó ayer en la cámara baja, esta situación se genera por el colapso que presenta la planta depuradora sur de Salta Capital y señaló que la provincia evalúa la posibilidad de realizar las obras necesarias para descomprimir el colapso de esta planta. En ese sentido destacó que buscan el financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y se precisa al menos 72 millones de dólares.

Cabe recordar que el Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) en su último informe reiteró sobre la existencia de sustancias que surgen de las cloacas y contaminan el río, y que tienen que ver con este colapso. Además, existen diversos estudios de académicos que dan cuenta de la brutal contaminación.