En Cerrillos el intendente saliente, Rubén Corimayo, le deja 100 nuevos puestos en la municipalidad a su sucesora, Yolanda Vega, quien se mostró preocupada porque no hay plata ni para pagar los sueldos de la planta actual.

Corimayo estuvo un par de décadas al frente de la municipalidad cerrillana y en las últimas elecciones perdió el sitial frente a Yolanda Vega que con el 47 % de los votos -contra el 26 % del actual intendente- en diciembre próximo asumirá como la nueva jefa comunal. Faltan pocos meses para ello y antes de asumir su puesto Vega se mostró preocupada por los movimientos que se están realizando en la intendencia con el pase a planta permanente de alrededor de 100 nuevos empleados.

La futura intendenta aseguró: “Pasó gente que estaba como contratada a la planta permanente y gente que trabajó para él en la campaña ahora está contratada. La  planta municipal incrementó un montón y es lo que me preocupa, porque no se puede pagar los sueldos. Los empleados hace dos meses que no cobran  y desde las elecciones primarias viene nombrando gente”, luego agregó: “Las decisiones que está tomando no me perjudican a mí, sino a todos los trabajadores y a la comunidad en general. Si no hay recursos para cumplir con los compromisos actuales, menos para los nuevos que se sumarán. Para Cerrillos cien nuevas personas es mucho, porque no se puede cumplir la prestación de los servicios públicos porque no hay un parque automotor adecuado. La gente reclama todos los días por la recolección de basura por ejemplo. Lo único que los le interesa (por Corimayo) es cumplir con sus compromisos políticos, descuidando su mandato”.

En los próximos días Yolanda Vega se reunirá junto a sus asesores con Rubén Corimayo para tratar el tema de los empleados, además comentó que ya pidió el informe realizado por la Auditoría provincial al municipio de Cerrillos.