El presidente del Foro del Intendentes, Mario Cuenca, cargó contra el sacerdote acusado de abuso sexual.
Después de declarar ante la justicia, el intendente Mario Cuenca volvió a disparar munición gruesa contra el sacerdote Carlos Aguilera, quien está acusado de abuso sexual por dos personas, que aseguran haber sido víctimas, 20 años atrás, cuando el capellán de la Universidad Católica estaba a cargo de la iglesia de Campo Santo.
“Aguilera no abusó de mí porque soy negro y fiero, y a él le gustaban rubitos y de ojos claros», dijo Cuenca en Aries Fm.
En la justicia Cuenca ratificó ante la fiscal del caso, María Lujan Sodero Calvet, que en el pueblo todo el mundo comentaba que el sacerdote andaba con niños. También declaró que él se reunió con entonces monseñor, para ponerlo al tanto de esta situación y, sin embargo, no hizo nada.
