El portal Norte Social publicó una nota sobre el estado de abandono en el que cayó el “Cantri”, el centro habitacional que Milagro Sala había montado en el barrio Alto Comedero en Jujuy.
“Hasta hace casi 20 meses, miles de niños, jubilados y vecinos jujeños disfrutaban de una mega pileta de casi tres hectáreas, parque infantil, centro cultural y de rehabilitación. Era el “Cantri”. El gobierno radical en Jujuy, la detención de Milagro Sala, los fondos castrados, dejaron despojos”. Así comienza el artículo titulado “La destrucción de lo bueno” que recuerda que antes de ser elegido en segunda vuelta electoral, el entonces candidato a presidente Mauricio Macri aseguró que mantendrían las cosas buenas hechas por el gobierno kirchnerista.
«Desde el 10 de diciembre del año pasado no pudimos poner en funcionamiento las piletas. Además de habernos cortado el agua en su momento, es muy costoso ponerlas en funcionamiento, alrededor de 200 mil pesos que hoy no tenemos», explicó el diputado provincial Juan Manuel Esquivel. Y agregó: «se robaron los cables subterráneos y las bombas de agua, destruyeron los sanitarios, es terrible todo».
A fin de noviembre de 2014, los medios de información jujeños divulgaron: “Este sábado, a las 13, con la presencia de la dirigente Milagro Sala, se realizó la inauguración formal de la Temporada de Piletas de la organización Tupac Amaru. La actividad, que incluirá a diario clases de aqua gym, se realizará en el Parque Acuático ubicado en Alto Comedero. La entrada es libre y gratuita”
Además de la pileta del “Cantri”, la Tupac Amaru tenía las piscinas en los barrios Malvinas, Villa Lidia, San Pancho, San Cayetano, Villa Belgrano, 370, Xibi Xibi y en las localidades de Perico, El Carmen, San Pedro, Parapetí, San Antonio, Chalucán, Calilegua, Volcán y Tilcara.
Sin fondos
En 2004, la organización Tupac Amaru comenzó la construcción de casi dos mil viviendas en el barrio Alto Comedero. La impulsora del proyecto urbanístico, Milagro Sala, luchó para instalar una pileta gigante, abierta a todos. La motivaba un feo recuerdo de su niñez, cuando le impidieron entrar a una colonia de vacaciones “por ser negra”.
«Desde que asumió (el gobernador, Gerardo) Morales intentó no sólo destruir a Milagro sino a la organización y al barrio», aseguró el diputado Esquivel (ver link anterior) Según su relato, su administración “cortó los fondos”. Desde obreros de limpieza y de las tres fábricas, a profesionales, más de cinco mil personas quedaron sin trabajo. Para sobrevivir, tuvieron que aceptar las nuevas condiciones laborales dictadas por el gobierno radical.
Desde la Tupac acusan a patotas enviadas por el gobierno para destrozar las instalaciones del Parque Infantil. Del otro lado, señalan a los “marginales” de la misma organización.
La socióloga Rosario Dassen aseguró: “Lo que nunca le van a perdonar a Milagro es que sea mujer, que se reivindique con muchísima dignidad y orgullo como indígena, que para la oligarquía de Jujuy es un pecado, es un insulto; y tampoco le van a perdonar nunca la pileta, ni a ella ni a la Tupac Amaru. Que un negro, que un pobre, que un indígena tenga una pileta, en Jujuy, no se lo van a perdonar nunca. Porque la pileta es también un símbolo de la plenitud, del cuerpo y de los derechos”, finaliza el artículo.